¿China siempre ha sido un país pobre?

10/10/2022

Si China es una de las grandes civilizaciones de la historia, ¿por qué en Occidente pensamos que China siempre ha sido un país pobre?

Más de un siglo de decadencia china ha dejado en el imaginario colectivo europeo la idea de que siempre ha sido un país atrasado. Sin embargo, la China del siglo XVIII era exportadora de productos de lujo (té, sedas, porcelanas, lacas…), y superior a Europa en aspectos como la siderurgia, la agricultura y los tejidos. Después de una expansión casi continua de ocho siglos, ¿por qué China entró en decadencia en el siglo XIX

Parece ser que, tras haber alcanzado el más alto nivel en campos como la agricultura intensiva, el acondicionamiento fluvial y la especialización y división del trabajo, los rendimientos del cultivo del arroz se estancaron. Se empezaron a cultivar las tierras altas, cuya deforestación provocaría inundaciones catastróficas. China se encontró con una mano de obra muy abundante a la que ni siquiera podía alimentar, y que hizo inútil continuar innovando para ahorrar en trabajo humano. 

La contradicción entre una extrema actividad económica y la imposibilidad de continuar innovando para aumentar el rendimiento económico, hizo que China cayera en la llamada trampa del equilibrio a alto nivel”.

El siglo XIX también será una época de graves problemas sociales, y del inicio del imperialismo por parte de potencias occidentales y de Japón. La derrota en las dos Guerras del Opio (1839-1842 y 1856-1860) supusieron la ocupación parcial por parte de Inglaterra y Francia. La gran rebelión de los Taiping (1850-1864), versión china del cristianismo introducida por los misioneros y mezclada con elementos de las tradiciones filosóficas chinas, hizo que los rebeldes controlaran parcialmente el país durante quince años, hasta ser derrotados por tropas extranjeras que apoyaron a la decadente dinastía Qing. A finales de siglo China perdió una primera guerra contra Japón. La rebelión xenófoba de los Bóxers (1899-1901) contra los privilegios otorgados a los misioneros y a otros extranjeros, provocó otra intervención de los poderes imperialistas, que aprovecharon para imponer más condiciones desastrosas a nivel económico.

Fumadores de opio

El opio lo introducían ilegalmente los ingleses para favorecer subalanza comercial, y fue un gran problema de salud pública en la China del s. XIX.

Una revolución republicana acabó con la dinastía Qing en 1912, pero fracasó en su intento de instaurar una democracia parlamentaria. A partir de los años veinte comenzó la guerra civil entre las fuerzas del Partido Nacionalista y del Partido Comunista, que se solaparía con la invasión japonesa de 1937 y acabaría en 1949 con la victoria del Partido Comunista. En 1949 Mao Zedong proclamó la creación de la República Popular de China, afirmando que “el hombre enfermo de Asia se había puesto en pie”.

Mao Zedong inició las campañas de colectivización de tierras a partir de los años cincuenta para movilizar la población y consolidar su poder. Dichas campañas incluyeron varias purgas, la campaña antiderechista, el Gran Salto Adelante (1958-1961) que provocaría una hambruna con millones de muertos, y la Revolución Cultural (1966-1976) que supuso una radicalización de la revolución china, con unos resultados también desastrosos.

Hay que añadir la lucha contra EE.UU. en la Guerra de Corea (1951-1953), donde empezaría el bloqueo económico y diplomático que sufrió China durante la Guerra Fría, y la traumática ruptura de China con la URSS, por la no aceptación china a la injerencia soviética a finales de los años cincuenta.

La Revolución cultural (1966-1976) fue lanzada por Mao Zedong para recuperar el poder (que había perdido tras el desastre del “Gran Salto Adelante”), con el pretexto de «luchar contra la corrupción y las desviaciones ideológicas». Fotografía de Li Zhensheng.

La inestabilidad permanente que ha vivido China entre los siglos XVIII y XX implica que, en la memoria colectiva de la población china actual, hay guerras, hambrunas y revoluciones; los únicos que siempre han llevado una existencia plenamente pacífica son los nacidos a partir de 1980.

Bibliografía